2 de noviembre de 2008

"Contemplando el jardín ajeno"


Citando a Paulo Coelho:


"Da al tonto mil inteligencias, y sólo querrá la tuya, dice un proverbio árabe. Comenzamos a plantar el jardín de nuestra vida y, cuando miramos al lado, reparamos en que el vecino está ahí, espiando. Él es capaz de hacer nada, pero le gusta ofrecer ocurrencias disparatadas sobre cómo sembramos nuestras acciones, plantamos nuestros pensamientos, regamos nuestras conquistas.

Si prestamos atención a lo que él dice acabamos trabajando para él y el jardín de nuestra vida será idea del vecino. Acabaremos olvidando la tierra cultivada con tanto sudor, fertilizada por tantas bendiciones. Olvidaremos que cada centímetro de tierra, tiene sus misterios y sólo la paciente mano del jardinero puede descifrarlos.

No vamos a prestar atención al sol, a la lluvia y a las estaciones... para centrarnos sólo en esa cabeza que nos espía por encima de la cerca.

El tonto al que le encanta ofrecernos opiniones disparatadas sobre nuestro jardín, nunca cuida sus plantas..."



Y es entonces cuando yo me pregunto:

¿ Por qué empeñarnos siempre en prestar más atención a lo que opinan los demás acerca de lo que hacemos, lo que decimos, lo que queremos, lo que somos?
¿Por qué no actuar sin tanto problema, sin importar si le gusta o no a alguien más el curso que deseamos darle a nuestra vida?

Parece mentira pero hay tantas personas que viven por y para los demás.
Si a alguien no le gusta como me visto, como camino, la profesión que elegí, la pareja que tengo, mis amigos, mi estilo de vida, mi manera de enfrentar y encarar las cosas…

Si mi vecino (entiéndase vecino a todo aquel que forme parte de mi entorno, independientemente de donde viva) está en total desacuerdo con mi ideología, conmigo en general, es relativamente normal.

¿Y saben qué?
Me importa un bledo.
No dejaré de hacer lo que desee, ni perderé nunca mi esencia sólo por hacer feliz a quien está más pendiente de la vida de medio mundo, menos de la suya.

Pero reflexiono un poco y llego a la conclusión de que hacen falta esas personas.
Después de todo, son necesarias. Porque sin saberlo, ellos contribuyen (además de a la molestia de inmiscuirse en todo) a que como personas de libre pensamiento y acciones, crezcamos más. Nos demos la tarea de automotivarnos a salir cada día más adelante para demostrarles a ellos y a nosotros mismos que no sólo somos los dueños de nuestros pasos, sino que aunque a veces los demos en falso, la mayoría del tiempo pisamos firme, con convicción, porque estamos seguros de lo que somos y queremos, y no aceptamos que venga alguien más a imponernos un estilo de vida distinta a la que anhelamos.

Sucede que los vecinos a veces no entienden que sus ideas lejos de ser importantes son abrumadoras. Aunque se dan casos contrarios.
Por ejemplo, ¿qué pasa cuando es nuestra madre por ejemplo la que quiere darnos miles y miles de ideas de cómo vivir nuestra vida? Obviamente nosotros elegimos cómo hacerla, pero tampoco es que no importen sus opiniones, al contrario, importan y mucho. El asunto es que de nosotros dependerá qué consejos y alternativas podemos optar, pero siempre y cuando notemos que no va en contra de lo que deseamos porque sino sucedería exactamente lo que se trata de evitar: QUE OTROS DECIDAN POR TI!!!

Padres, hermanos, amigos, pareja, compañeros; jefes, vecinos en general, se les agradece muchísimo que se preocupen por mi, que mi vida les importe, que deseen lo mejor para mi (algunos), que traten de contribuir dando alternativas, puntos de vista; pero honestamente, cada quien es libre de escoger lo que crea conveniente y si existen diferencias de opiniones, es válido, no todos pensamos igual. Cada ser es distinto y en parte semejante a los demás, por eso cada quien se debate en la conducción de su vida.
¿Que nos equivocamos a veces? Todos lo hacemos, nadie es perfecto. Pero somos libres, independientes de vivir como lo deseemos.

Porque si bien es cierto que algunos opinan de más por nuestro bien, también lo es que otros lo hacen por el caso contrario, simplemente para fastidiarnos la vida a más no poder.
Entonces independientemente de las situaciones y para evitar posibles desacuerdos y disputas, digo: STOP!!!

NO A LOS ENTROMETIDOS!!!

VECINO, ENCARGATE DE TU JARDÍN, QUE YO ME OCUPO DEL MIO…!!!

6 comentarios:

Juan dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Anónimo dijo...

Me parece excelente que plantees tu punto de vista acerca de aquellas personas que siempre son tan buenos samaritanos y te indican como deberias de hacer las cosas, concluyo que si se necesita de buenos consejos para llegar lejos pero todo en exceso es demasiado, seamos responsables de nuestra vida y aceptemos aquellos buenos aportes que terceros nos ofrecen y desechemos los que no seran utiles; y si Paulo Coelho ha sido tu inspiracion para estas reflexiones Bravo... todos tenemos algo que decir lo importante es decirlo nadie tiene la certeza de si tu reportaje cambiara un estilo de vida para mejor.. Felicidades Onix .. Att. Avellanet

Jeanfreddy Gutiérrez dijo...

Vaya, muy elaborado y trabajado, muy dedicado :) excelente comienzo. Un abrazo!!!!

Eso si, Coelho tampoco es de mis favoritos :) un beso.

Javo León dijo...

(A mi, si me gusta Coelho aunque no sea precisamente lo mejor)

Muy interesante post, y me ha hecho pensar mucho. Parece simple pero no lo es, y me gusta tu manera de pensar.

Yo creo que los consejos más importantes son los que te forman como persona desde pequeño, los que te educan, y te hacen ver la REALIDAD "sin sesgo", ya después uno mismo, aprenderá a ser asertivo o a negarse lo que no nos convenga.

Unknown dijo...

Hola Onix!

Pues, me ha parecido demasiado linda tu manera de decirle al mundo "es mi vida, yo decido".....me ha gustado tu estilo dulce pero determinado.

Gracias por visitarme y estaré visitándote más a menudo ;)

Un abrazo!

Diang Lugo dijo...

Entiendo perfectamente que existen muchísimos mejores autores que Coelho y mi lectura es diversa. Entre los distintos escritores que prefiero, encontramos a wilde, Dostoievski, Stivenson, Chistie, Marquez,Anni Rice, entre tantos porque repito, adoro leer y la lista es larga.
Sin embargo, no veo nada de malo en la lectura de Coelho, ciertamente no es el mejor, pero es una lectura muy fresca y persuasiva; a mi juicio, tiene mucho que aportar y con algunos pasajes como el expuesto en mi post, logra enfocarnos en la reflexión.

Independientemente del autor, lo que verdaderamente me importa es la literatura, la que logre adherirme, en esta oportunidad fue esa de Coelho, ya vendrán otras.
(Confieso tener la colección completa de sus libros, así como muchísimos otros de centenares de autores), no veo nada de malo en leer, si leo hasta las etiquetas de los productos, por qué no leer Coelho?

Muchísimas gracias por la visita que me han realizado y por supuesto por sus apreciaciones.

Saludos...